29.7.14

Barranco Mascún inferior o O´Palomera







Las oseras de Aitzbitarte

Aitzbitarte IV situada en el afloramiento cárstico que lleva su mismo nombre (actualmente dicen debe llamarse Aitzpitarte), es una de otras tantas cuevas de discreto tamaño que horadan esta montaña. Son 35 las catalogadas. Imprescindible para entender la importancia geológica y paleontológica de este complejo es el estudio realizado e incluido en el número 49 de la revista Munibe del año 1997, por  Koldo Sansinenea y Javier Manteca. Aizbitarte IV es la de mayor progresión y de importancia junto a Aitzbitarte III por su valor arqueológico, aunque no se encuentra cerrada como esta última, en proceso de excavación y, lamentablemente, recientemente expoliada. Aitzbitarte IV fue de los primeros hallazgos del paleolítico de toda Euskalherria, su descubrimiento en 1892 llevó a numerosas campañas de excavaciones arqueológicas, concluidas en la actualidad. De particular interés han quedado en una galería superior fósil, cerrada para su preservación. Esta galería tiene unos 60 metros de desarrollo terminando en una sala de unos 10 metros, se observa en su progresión aristas de roca pulimentadas por los osos, así como  un buen número de oseras y, entre multitud de pintadas del siglo pasado que cubren casi la totalidad de los lenares inversos de su techo, zarpazos de estos animales. El número de oseras localizadas es de ocho, con la clásica forma de estas, de hoyo y plato grande de unos 180 centímetros de diámetro y 40 de profundidad. Las oseras son los nichos donde los osos hibernaban, generalmente construidas en los suelos de galerías en arcilla o arena como es el caso. En su día se hallaron fragmentos óseos de cráneos de estos animales junto a las oseras. Hoy día la galería está pendiente de estudio y de ahí su cerramiento.
Actualizado a 18/12/2015: A fecha de hoy la galería colgada de las oseras perteneciente a Azpitarte IV por desobstrucción se ha conectado con la V (actualmente cerrada) y se han encontrado entre los zarpazos de osos y alguna desafortunada pintada, cuatro bisontes marcados en sus paredes de gran belleza. El acceso de la chimenea de la IV se encuentra cerrado.

Zarpazos de oso de las cavernas.






14.7.14

Barranco d´a Glera o Barranco de Forcos.

El Barranco de d´a Glera, mal llamado de Forcos, en el mundillo barranquista, donde este error está muy arraigado. En puridad el tramo deportivo no se llama Forcos, correspondiendo este nombre sólo al tramo de río aguas abajo de la confluencia con el barranco d'a Pera.. Cuando Fernando Bierge y eJean-Paul Pontroue publicaron por primera vez este descenso, lo nombraron correctamente Barranco de Otal + Forcos dado que ellos reseñaron también el largo tramo de senderismo fluvial entre las pasarelas y la desembocadura en el Ara. Posteriormente, se ha extendido erróneamente el hidrónimo Forcos al tramo del barranco o glera de Otal, o A Glera, pero realmente Forcos es sólo el tramo final. (Aportación de la toponimia de este barraco de Alex Puyó)
Los primeros 200 metros de este barranco son espectaculares, a nivel estético de lo mejor que podemos encontrar en los Pirineos centrales. El Barranco d´a Glera, está cerca de Bergua, en pleno Sobrepuerto. Accederemos por una pista a tramos asfaltada que sale desde Fiscal.
Para aproximar al barranco cruzaremos el pueblo y tomaremos la senda en dirección a Escartín y que baja directamente al cauce del Forcos. La senda llega al cauce del río, justo en la confluencia del Forcos con el Barranco d´a Pera, cauces que actualmente su cruzan por unas pasarelas metálicas. Una vez cruzadas las pasarelas, tomaremos la senda que va en dirección a Escartín. Un poco más adelante encontraremos un nuevo cruce y tomaremos otra que va a "Otal por Barranco". En 1h aproximadas llegaremos al cauce del barranco, dónde nos podremos cambiar en una gran losa justo en la entrada de la garganta por dónde tendremos que descender la primera cascada, la única dificultad real que tiene el barranco, y que con agua suficiente puede saltarse. De hecho se puede, si el cauce lo permite, hacer todo el barranco sin cuerda alguna.
Desvío hacia el barranco.




El barranco se abre y nos termina en el puente metálico tras un precioso paseo.

La Verna.

 La Verna fue descubierta hace ya 61 años (1953 varios espeleólogos franceses descubren la sala, desciendo desde Isaba). Es una de las salas subterráneas más grandes del mundo, 62.000 metros cuadrados, 270 de longitud por 230 de ancho y 180 de altura, situada bajo la Piedra de San Martín. Al observarse en su interior una potente cascada de agua, un año después, una empresa francesa barajó la posibilidad de poner una central hidroeléctrica en su interior para su aprovechamiento. Para ello abrieron un túnel, un pasillo de 800 metros, no sin dificultades, que les hicieron rectificar su dirección en varias ocasiones, hasta conectar la gran sala con el exterior. Es el pasillo que hasta hace poco se usaba como acceso directo para espeleólogos y hoy día sirve para mostrar el monumento geológico a turistas y curiosos con fines didácticos, reservándose visita a través de www.laverna.fr.
Hace cuatro años un numeroso equipo del grupo Félix Ugarte Elkartea se acercó a la Sala de la Verna y realizó una panorámica espectacular de 180 grados. 20 tomas con una exposición de 4 minutos y una correcta distribución del equipo de iluminación, crearon una imagen de la Verna increíble, que hoy se vende como postal en el propio lugar.
Entrada a la galería de acceso.

Galería de acceso.

Los puntitos lumisosos son luces de personas.


Osparrun II.

 Boca de un metro por uno setenta de ancho, aproximadamente, se encuentra a escasos metros bajo Osparrun I . La entrada con la hierba creci...